Conciertos antes de Navidad: una alternativa a las zambombas jerezanas

 

Nos encantan las navidades y no solo porque sea el cumpleaños de Isa durante todo el mes de diciembre, sino porque también son fechas en las que vamos a visitar a lo mejor que tenemos en el mundo: nuestras familias. Así que, en mi caso, allá iba el 21 de diciembre camino de mi tierra, Jerez, con una ilusión tremenda y no sólo por esa razón, sino porque además el viernes 22 había un festivalazo de flipar al que estaba deseando asistir. 

Tras casi diez horas de viaje, acompañada únicamente de buena música y mis ganas de llegar, por fin estaba en Jerez. Abrazar, comer abrazar, dormir es todo lo que hice esos días que pasé allí excepto por el viernes 22 porque la buena gente de Carretera y Manta había montado el sarao del siglo compitiendo con las zambombas jerezanas que inundan las calles y los bares durante esos días y además por una buena causa: llevabas un juguete o un libro con tu entrada gratuita (sí,todos estos grupazos gratis) para la asociación Proyecto por una sonrisa.

Todo sea por ayudar, y si además nos divertimos y nos reencontramos con amigos, mejor que mejor. Había que estar allí temprano, porque lo primero era un sorteo de un tattoo (tenía el 62 y salió 65, mecachis). Y a partir de ahí todo fue rodado.

La fiesta comenzó con los jerezanos Komando Garum, los únicos autóctonos, que no tuvieron que sentir eso de tocar para cuatro porque la sala Paul ya estaba llena desde antes de que comenzaran los conciertos. Punk rock embrutecido y cañero, mucha diversión y palitos de luz azules por todas partes (como en Navidad cuando pasas por algún sitio, ves luces azules, piensas que es la policía y solo es una casa con decoración navideña azul). El caso es que Komando Garum consiguieron lo que se proponían: que todos lo pasáramos genial ya desde el comienzo de la tarde.

Seguimos con Negocio, punk rock metalero desde Roquetas de Mar (permitidme un inciso: os juro que cuando dijeron de dónde venían alguien gritó croquetas... y de verdad que no fui yo). Muy elegantes ellos, encamisados y con corbata, dando muchísima caña y acompañados de una bandera andaluza y un palestino colgado al micro. Con qué poquito se puede reivindicar lo que de verdad importa. De lo mejorcito de la banda su vocalista con una voz grave que te ponía los pelos de punta.

Tras ellos los ya conocidos Kamikazes, de los que puede disfrutar el año pasado en el Luaña rock. Una descarga de adrenalina brutal que terminó por sorpresa con una increíble colaboración cuando Samuel, Lasyra e Irene de XpresidentX subieron al escenario a darlo todo. 

Continuamos con los mencionados XpresidentX, para mí la guinda del pastel, nos dieron el bolazo al que nos tienen acostumbradas. Pura diversión y temazos en una hora de concierto que supo a poco, donde todos los componentes se movieron como pez en el agua y sobre todo nos deleitamos con los movimientos de su bajista Irene (te queremos, tía). Como me dijo un amigo sobre la banda en cuanto acabó el concierto: "vaya descubrimiento, tía". 

Y ya para terminar los malagueños Loncha Velasco de los que pudimos disfrutar también en Oviedo y las pasadas navidades también en Jerez,en lo que ya parece que se está convirtiendo en un clásico de las Navidades jerezanas. Qué vamos a decir de ellos que no sea bueno. A pesar de que varios de los componentes estaban enfermos vaya conciertazo dieron. Hubo colaboraciones (como por ejemplo nuestro Zequi de Narco), hubo buen rollo y hubo jarana y cachondeo a tope. Estos tíos saben lo que se hacen. Ojo con ellos.

 Y se acabó. Aunque lo mejor de toda la tarde fue haber estado acompañada de tus mejores amigos de toda la vida, esta vez por diversas razones no podemos continuar la noche como nos hubiera gustado. Eso sí, nos llevamos ese buen sabor de boca y ese inmejorable trato recibido al público y a las bandas por parte de Carretera y Manta Producciones. Sois grandes. Seguid así.

@niunpeloderubias