Rockvera 2024: Música y reencuentros.

Tantos años de Rockvera han dado para mucho. El pasado sábado se celebró la edición de 2024, y vamos a intentar ser breves porque con tantas bandas y tanto que contar, esto podría hacerse eterno.Ante todo mil gracias a la organización por el currazo que se pegaron y por ser tan majos con todos los asistentes. 

Desde bien temprano y en dos tandas  (sesión vermut y tarde), que en principio iban a ser en dos ubicaciones distintas pero por inclemencias meteorológicas decidieron que fueran todos en El Llar, casi a la hora de los churros, a las 12:30 comenzaron con su característico show The Black Panthys Party, divertidos, cañeros e irreverentes como siempre. Y además, con una colaboración especial que no vamos a contar por ahora porque preferimos que la veáis muy pronto en vídeo en nuestro Instagram.

Tras ellos, Tribute Against The machine llenaron la sala de tal manera que casi no se podía acceder a las primeras filas, demostrando que, por mucho que les tengamos cierta manía a los tributos, van a llenar siempre. Pero la calidad es la calidad. Y eso es algo a tener siempre en cuenta.

Ya de tarde, Brutalfly, en su línea de inclasificables, nos trajeron su música y actitud, dando cuenta de que solo tres componentes ya son más que suficientes y que están cada vez más presentes en la escena asturiana.

A La Morgue hacía tiempo que no los veíamos sobre un escenario, y volvieron a hacernos bailar y disfrutar de su swing core. 

Siempre adoramos ver a Flashback. Para nosotras es uno de esos grupos que deberían estar tocando más a menudo y en grandes festivales incluso, pero por desgracia no es así, por lo que cada vez que tenemos la oportunidad, intentamos no perdérnoslos. Y siempre merece la pena verlos y disfrutar al máximo de ellos. 

Sinaia ya llevan un tiempo siendo uno de los referentes en muchas salas y festivales, y esta vez al poder verlos en directo nos dimos cuenta de por qué. Su metal rock con toques punk deleitó a todos y el público se llevó un gran sabor de boca con su actuación. 

A Free City ya los disfrutamos hace un par de años en el mismo escenario y no han perdido su esencia, con una sala nuevamente llena, como ocurrió casi todo el día. 

Onza tronaron desde el primer momento y nos demostraron que, aunque ya no existan Desakato, tenemos un gran relevo.

Lo sentimos por Vhäldemar porque después de tantas horas no pudimos quedarnos a verlos (os compensaremos la próxima vez 🙏).

Y todo ello regado de mil encuentros y charlas con amigos y conocidos de siempre, lo que hizo que, a veces, no pudiéramos disfrutar de conciertos enteros.

Y por si fuera poco con tantas bandas y tantas horas de música, también se entregaron premios. O premio, en concreto, a nuestra querida Rheme que siempre está presente y su solidaridad no conoce límites.

Si algo nos está demostrando el Rockvera, es que El Llar se les está quedando pequeño, aunque esperamos que nunca lo cambien de ubicación, todo hay que decirlo. 

@niunpeloderubias